jueves, 18 de junio de 2009

S/T (Es que acaso todo debe tener un nombre o una razón?)

Así sin querer se pasó otro mes más en el que dejé de lado mi pequeña afición de escritor, cierto es que mucho tuvo que ver la pereza, el cansancio y la presión de ciertas labores y jornadas académicas pero ahora que las menciono me suenan como viles excusas que repudio…esto ya me viene sucediendo con cierta frecuencia y pienso que se torna en algo preocupante; usualmente no le tomo mucha importancia pero es momento de reaccionar, porque si sigo en ese plan siento que seré devorado vivo por ello.
En estas últimas fechas no ha ocurrido nada lo suficientemente importante como para narrarlo o es que tal vez sea yo él que no ve dichas situaciones como potenciales historias en mi blog. Debo admitir que dentro de toda esa vorágine he estado un tanto triste y apagado, ha habido circunstancias que han supuesto para mí algún disgusto o desavenencia, la impotencia y la rabia de saber que no siempre es conveniente darlo todo o esforzarte (aunque algunos sigan pensando que no lo hice).
Me incomoda la falta de sinceridad o de confianza o de entereza o de huevos para poder decirle algo a alguien directamente y en la cara, sin tapujos ni rebusques.
Me jode sobremanera el hecho de simplemente desaparecer y hacerse el idiota para luego contestar con un desgano que es para mí el tiro de gracia.
Me da pena saber que no todas las personas en las que confías, confían en ti de la misma manera; haciéndome sentir tonto, vacío…conste que digo “confías” y no “confiabas” con lo que reafirmo mi idiotez muchas veces alabada.
Suena a consejo de madre eso de “cuidado, no vayas por aquí, no pares por allá, no cuentes todo, no confíes mucho” pero considero que es imprescindible equivocarse para aprender, equivocarse incluye sacarse la mierda y sufrir con el error. Aunque lo mío no es terriblemente trágico me duele un poco aún. No es resentimiento, es pena meramente; pena que como a todo artista creo le sirve para generar un poquito de arte, si no es así pues al menos me basta con saber que es mi caso…
Esto me sirve también para darme cuenta de lo importante que resulta comunicarse, me pregunto, ¿Qué es lo que cuesta ir a decirle a tus patas (si es que confías lo suficiente en ellos) que tienes algún tipo de impedimento? Es acaso más divertido ver la angustia y la preocupación de sus rostros, o dejarlos en vilo a la espera de una palabra?
Soy consciente de que todas las cosas suceden porque tiene que suceder y nada más, pero hay formas de hacer más sutil el golpe, de paliar el dolor…creo que hasta puedo estar exagerando un poco pero es producto de la subjetividad que revolotea en mis venas y dirige mis dedos.
De momento tengo enamorada pero ya no tengo banda, algo así como que la vida te quita y te da cosas y es con eso que vas haciendo tu vida, siendo feliz con lo que recibes y entristeciéndote con lo que pierdes, aunque también puede ser al revés, tanto que ni se cómo sentirme al perder una banda, pues no es el hecho de cesar así por así sino que casi imperceptiblemente los vínculos van deshaciéndose de a pocos.
Es hora de irme a la universidad, inicio la última semana de clases y al menos en estos días debería comportarme como un alumno responsable…Si este texto le sirve a alguien como una pseudo-respuesta a alguna conversación pendiente pues que la asuma como tal.